Estamos rodeados de ciencia. El simple hecho de que estés
leyendo esto se lo debemos a la ciencia, porque gracias a la ciencia, se estudió
la electricidad, que abrió el mundo de la tecnología, y con los años ha ido
evolucionando hasta permitir que algo que escriba yo en mi casa, tú lo puedas
leer estés donde estés y cuando quieras. Otro ejemplo sencillo es en la
industria alimentaria, porque la conservación de productos es prácticamente
imprescindible en la actualidad, por ejemplo, sin las neveras, sería mucho más difícil
la industria alimentaria. Ahora imaginemos a una familia de Hiroshima,
desayunando por la mañana, la ciencia también ha destruido lo que ha creado.
Hagamos un repaso en la historia, nos encontramos en Egipto,
2000 años a.c., aquí el mundo seguía las normas que daba la religión, pero aun
así, se puede decir que aparece la ciencia, pero de una forma distinta, todavía
no se conocían los métodos científicos, y lo que se conoce como ciencia
moderna, pero ya se empezó a investigar y a preguntarse sobre el entorno. Más tarde,
la antigua Grecia, donde aparecen las primeras fórmulas matemáticas, es decir,
la base de la ciencia, aunque en estas dos culturas, los sucesos naturales se
explicaban mediante mitos, basados en la religión, y poco a poco, se empezó a
usar la religión para explicar la realidad. Y así siguió durante cientos de
años, cuando aparecen ciertos movimientos científicos, sobre el siglo XVI, y
poco a poco, condenados por la religión, fueron tomando poder. Aquí es cuando
aparece la ciencia moderna, el método científico, y la continua evolución del
conocimiento del mundo. Se empieza descubriendo el mecanismo del mundo, y poco
a poco se va aplicando, y en estas aplicaciones está el debate entre si esta
ciencia es buena o mala. Pero en mi opinión, la ciencia no tiene una intención para
hacer el ''bien'' o el ''mal'', si no son los usos que se les da a esta los
que influyen, es decir, con el descubrimiento de la fisión nuclear, se ha
intentado entender el comportamiento de los átomos, y a partir de este, se
puede usar tanto para producir energía, como para la creación de bombas, por lo
que para mí, la ciencia no hace el bien ni el mal, hace el conocimiento, y es
el uso de esta ciencia el que influye. Aun así, se puede considerar que si desarrollas
un método para crear bombas, haces el mal, pero la ciencia es un reflejo de la
sociedad, y no es la ciencia si no la propia sociedad la que hace un mal uso de
esta.
Planteémonos esta cuestión desde otro punto de vista, el
futuro. Voy a plantear tres hipótesis: la primera es un futuro con la ciencia
muy desarrollada: tendríamos una sociedad mucho más avanzada, en la cual todo
está automatizado, y es mucho más eficiente, pero a su vez se sustituiría el
mundo natural por la tecnología, el humano no tendría la condición que podría
tener, es decir, todo estaría conectado, por lo que un ataque informático puede
desestructurar toda la sociedad, además se perdería la libertad, y el medio del
hombre, que siempre ha sido la naturaleza sería cambiada por la tecnología, por
no hablar de problemas concretos, como la inteligencia artificial llevada al
extremo, otra situación podría ser una hipotética prohibición de la ciencia, la
situación tendría un avance regresivo, es decir, volveríamos a una sociedad del
pasado, en la cual no existe la democracia, desaparece la industria, etc… el
último caso sería una ciencia de algún modo regulada, es decir, no todo el
mundo tiene acceso a la ciencia, que podría provocar desde una sociedad
utópica, llena de valores como la igualdad o la libertad (ojo, no digo que este
sea el único método), hasta provocar una dictadura llevada al extremo.