domingo, 31 de mayo de 2015

Evaluación de las clases de filosofia

Madrid, 26/05/2015, 18:14. El alumno debate entre sus instintos y deberes, debería estudiar, pero esas campurrianas tienen tan buena pinta... Antes de acabar sucumbiendo ante tan deliciosa galleta, se da cuenta que tiene que escribir una critica a la clase de filosofía, y eso tiene lo que mas le gusta a una persona de su edad. ¿La filosofía? No, más aún. Efectivamente, es criticar. Arrastrandose por el pasillo de su casa, consigue llegar al ordenador, cuando una pregunta aparece en su cabeza. No sabe que poner, asique decide empezar hablar sobre las clases:

Las clases de filosofía, han sido muy entretenidas y amenas, y el profesor ha sabido dar todo el temario de manera que toda la clase entendiera todo, y no dejando de ser muy divertidas, y que todos los alumnos estabamos deseando que llegara la clase de filosofía. 

Atónito ante tanto peloteo, decide borrarlo todo, e intentar buscarle algún punto malo.

A pesar de que las clases eran muy interesantes, y Enrique conseguía enseñarnos perfectamente no solo el temario, si no mucha cultura general, solo hemos dado 5 hojas de teoría, y había momentos que para explicar algo usabamos una clase entera. De todos modos, el temario ha sido muy interesante, sobre todo por como nos ha enseñado todo lo que hemos dado.
Además, cabe destacar las muchas maneras que había para interactuar con la asignatura, pues aparte de los examenes, los blogs y los tweets favorecían que no solo tuvieramos contacto con la asignatura en clase y los días cercanos a los examenes, si no una manera de expresarnos sobre la asignatura, de manera que la clase de filosofía no este únicamente en periodo lectivo. 
En los examenes, el sistema de 3 examenes me parece muy interesante, pues hay alumnos que pueden carecer de redacción, pero la parte de aplicar teoría se les puede dar mejor. Además, en los examenes se evalúa a parte del temario, una serie de artículos que el profesor ha twitteado previamente, lo que hace al alumno estar al día, e interesarse por lo que pasa en el mundo. Aunque por poner una pega, el hecho de gastar dos clases para examenes hace que se pierda algo de tiempo, ya que la asignatura es únicamente 3 días a la semana.
En cuanto a los examenes de lectura, yo siempre he estado en contra. Leer un libro por obligación por deber y no por interes propio hace que la lectura se convierta en algo negativo, y no se acaba disfrutando realmente aquello que se lee, por lo que en mi opinión, en lugar de hacer un examen de lectura obligatoria, sería más productivo invitar al alumno a la lectura, de manera que no se sienta obligado a ello, y empobrezca drásticamente su experiencia.

Ya ha superado los 250 caracteres, asique decide descansar, y si se lo ocurre una nueva idea, modificaría el blog.

3 días despues, ya queda menos para que llegue la fecha límite para enviar el blog. El alumno vuelve a leerse el blog, corrige algunos fallos y decide leer algunos otros que ya hayan sido enviados. Entra en la página web la lechuza de Minerva, y se da cuenta de que hay más de 10 blogs iguales al suyo, pero él quiere hacer algo distinto.

Tras otro día mas pensando, decide contar como es una clase de filosofía, diciendo lo que le gusta y lo que no, pero ve que es muy largo y aburrido. Finalmente, tiene la brillante idea de contar la historia de un alumno escribiendo el blog sobre la crítica a la clase de filosofía:

Madrid, 26/05/2015, 18:14. El alumno debate entre sus instintos y deberes...

martes, 26 de mayo de 2015

Elecciones autonómicas y municipales

Ya se acerca el 24 de mayo, un día insignificante para muchos españoles, pero que paradójicamente significa mucho para ellos. Las elecciones municipales y autonómicas se acercan cada vez más, con el panorama político más repartido desde la transición, el famoso “fin del bipartidismo”, y un país indeciso. Según la última encuesta del CIS, los votos se reparten entre 4 fuerzas políticas, que poseen desde un 25,6% el PP hasta un 13,8% por parte de Ciudadanos.

Desde el famoso ascenso de Podemos, y toda la mentalidad de cambio, el PP y PSOE poco a poco han perdido intención de voto, y aparece una gran incertidumbre. Con el tiempo, se ha ido normalizando la situación, y poco a poco, la mentalidad de cambio se ha ido asentando, hasta el punto que ha vuelto a ser lo de siempre. Pero el fenómeno más destacable de estos últimos meses ha sido el ascenso de Ciudadanos, siguiendo el modelo de partido que sale de la nada de Podemos, y fragmentando aún más si cabe el panorama político. El partido de Albert Rivera trae la ‘’nueva política’’, la idea de que el PP ha quedado anticuado, y negando desde el principio una coalición entre C’s y PP la ‘’derecha’’ se fragmenta. Por el otro lado, la ‘’izquierda’’ no es menos, con un PSOE intentado dar una imagen renovada (aunque Ángel Gabilondo parece seguir el estilo de Rubalcaba), un Podemos que pasa de una política muy reformista a una más conservadora, y una IU un poco olvidada.

Se prevé una gran igualdad de votos, tanto en las autonómicas como en las municipales, y aunque quizás C’s está todavía en periodo de ‘’boom’’ y no consigan tantos votos como se podría llegar a creer. Lo más seguro es que para un partido sea muy difícil alcanzar la mayoría absoluta. Esta situación ha llegado hasta el punto de concebir coaliciones en prácticamente todas las comunidades y localidades. Ante esta situación viene una palabra a la cabeza: pacto. Esto puede favorecer al desarrollo del gobierno, ya que los partidos se regulan entre sí, y centrarse en mejorar la situación socio-política. Un ejemplo de esto es el municipio de Madrid. Las encuestas predicen que el partido Ahora Madrid tendrá prácticamente los mismos escaños que el PP. El ‘’partido’’ de la exjuez Manuela Carmena, ha destacado por ser una especie de filial de Podemos, pero con un enfoque más centrado en el municipio. A pesar de la irrupción de la ‘’nueva política’’, el PP sigue logrando mantenerse como fuerza que logra una mayor cantidad de votantes (en las encuestas), y a pesar de perder muchos votantes y teóricamente no lograr la mayoría absoluta, sigue manteniéndose en la cima de la mayor parte de localidades españolas.

Si observamos los programas de los partidos, todos presumen de ofrecer las soluciones para la situación actual, ya sea en cuanto al paro, educación, sanidad, y también un destacable hincapié en solucionar la situación con los desahucios. Pero más allá de lo que promete cada partido de primeras, todos proponen soluciones prácticamente antagónicas. El PSOE defiende una gestión que no se distancia mucho de las de los años anteriores, un poco contradiciendo la idea de renovación del partido, aunque cabe destacar que Carmona se ha posicionado en una posición más crítica. En el PP destaca una campaña electoral en la que de repente ‘’vamos en la buena dirección’’, los altos diligentes han salido a las calles, ya sea a montar en bici o a la pradera de San Isidro, y sin embargo su programa es prácticamente idéntico al de 2011. En los nuevos partidos, destacan nuevas soluciones, como que la vivienda desahuciada vaya para alquiler social por parte de C’s o el rescate fiscal de Podemos. La olvidada IU sigue prometiendo como cada año un programa que lucha contra el fraude fiscal e intenta ofrecer unos ‘’servicios públicos’’ para todos.

En definitiva, tras esta máscara de los nuevos partidos, la situación del bipartidismo en cuanto a las elecciones se repite, solo que con dos nuevos invitados. Lo que desaparece es la mayoría absoluta, los pactos post-elecciones vienen a ser la nueva forma de hacer política. Lo que está claro es que el panorama ha cambiado, pero no ha ido ni hacia la izquierda ni hacia la derecha, directamente ha mezclado los dos lados, y los ha puesto al mando de los municipios y autonomías.


Bienvenidos a la verdadera nueva política.